Proteger la educación en situaciones de emergencia - Versión corta

PROTEJAMOS LA EDUCACIÓN EN EMERGENCIAS ¡YA!

#PROTECTEiENOW! (en inglés)

PLANIFICACIÓN INCLUSIVA, FINANCIAMIENTO SOSTENIBLE, DERECHOS REALIZADOS

Un llamado a la acción para garantizar una educación transformadora, inclusiva, equitativa y de calidad, y oportunidades de aprendizaje para toda la vida para todas las personas en contextos de emergencia

El objetivo de la campaña Protejamos la educación en emergencias ¡ya!, liderada por la Campaña Mundial por la Educación (CME), es plantear propuestas que permitan abordar de forma urgente la necesidad de garantizar una educación de calidad transformadora, inclusiva y equitativa, y oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todas las personas que viven en contextos de emergencia, en especial niños, niñas y jóvenes.

La pandemia de COVID-19 se ha sumado a otras crisis ya existentes, que se caracterizan por ser cada vez más complejas y multidimensionales, así como por estar cada vez más interconectadas. Muchas de ellas terminan convirtiéndose en crisis cíclicas y/o prolongadas, lo cual tiene unas consecuencias devastadoras para el derecho a la educación de millones de personas, especialmente para las vulnerables y excluidas. Ya antes de la pandemia de COVID-19, 127 millones de niños, niñas y jóvenes en edad de cursar educación primaria y secundaria en países afectados por crisis estaban sin escolarizar; esta cifra supone casi la mitad de la educación mundial no escolarizada^[1]. Según UNICEF, se prevé que más de 24 millones de niños y niñas abandonen la escuela a causa de COVID-19 ^[2]. A pesar de la gravedad de la situación, la educación sigue siendo uno de los ámbitos menos financiados de la ayuda humanitaria, ya que recibe tan solo el 2,4 % de la financiación humanitaria mundial.

Esta realidad resulta particularmente alarmante si tenemos en cuenta que el cumplimiento del derecho a la educación está vinculado a una vida mejor para todas las personas, no solo en términos de conocimientos y habilidades, sino en cuanto al papel de la educación como un espacio seguro que ofrece protección a las personas y comunidades, así como a la sociedad en su conjunto. Además, cuanto más tiempo pasan las personas sin asistir a la escuela y en situación de exclusión socioeconómica y política, menos probable es que retomen su educación. Así pues, la educación debe ser una prioridad en la respuesta a todo tipo de crisis y emergencias.

Esto debe cambiar. Este llamado a la acción ofrece una serie de recomendaciones políticas para que los gobiernos garanticen una educación de calidad, transformadora, inclusiva y equitativa, y oportunidades de aprendizaje para toda la vida, a todas las personas que viven en contextos de emergencia.

La campaña Protejamos la educación en emergencias ¡ya! hace un llamamiento a todos los actores involucrados en las respuestas humanitarias, especialmente a los Estados, para que:

1. Protejan y garanticen la realización del derecho de todas las personas que viven en contextos de emergencia a una educación pública de calidad, con entornos de aprendizaje empoderadores, seguros, respetuosos, inclusivos y accesibles para todos los y las estudiantes, independientemente de su estatus legal, edad, género, discapacidad, condición socio-económica, etnia, raza o cualquier otra forma de discriminación y exclusión.
2. Desarrollen y apliquen planes y presupuestos educativos nacionales sensibles a las crisis, e integren medidas de preparación ante situaciones de emergencias en la planificación del sector educativo, de manera que puedan garantizar la realización del derecho de todas las personas a una educación de calidad en cualquier situación.
3. Escuchen a las personas afectadas y los actores locales - sociedad civil local, organizaciones de personal docente; grupos de niños, niñas y jóvenes, y padres, madres y comunidades -; reconozcan su papel crucial en la respuesta,  y garanticen su participación real desde las primeras fases del diseño, planificación e implementación de las respuestas educativas en contextos de emergencia, para así reforzar de manera sostenible la resiliencia de los sistemas educativos nacionales ante las crisis.
4. Garanticen una financiación suficiente, sostenible y previsible de la educación en situaciones de emergencia, asignando al menos el 10 % de la financiación humanitaria a la educación, incluyendo a través del apoyo al proceso de reposición del fondo Education Cannot Wait (ECW), de manera que pueda cumplir con su objetivo de financiación de 1000 millones de dólares para el período 2023-2026.
5. Promuevan la inclusión equitativa y sostenible de las personas refugiadas, solicitantes de asilo, retornadas, apátridas y desplazadas internas en los sistemas educativos nacionales,  apoyando a los países de acogida para reforzar sus sistemas educativos nacionales y hacerlos más inclusivos y transformadores.
6. Garanticen la igualdad de oportunidades de niñas y mujeres en el ejercicio de su derecho a la educación en contextos de emergencia, y apliquen una perspectiva de género a la planificación, presupuestación y ejecución de los planes de respuesta a emergencias.
7. Garanticen la igualdad de oportunidades de las personas con discapacidad en el ejercicio de su derecho a la educación en contextos de emergencia, y apliquen un enfoque de educación inclusiva a la planificación, presupuestación y ejecución de los planes de respuesta a emergencias; este enfoque debe incluir la recopilación de datos desglosados ​​que permitan conocer en mayor medida las necesidades de los y las estudiantes con discapacidad, y contribuyan a una toma de decisiones más inclusiva en el futuro.
8. Garanticen la disponibilidad de docentes adecuadamente capacitados en contextos de emergencia, mejorando su remuneración, incentivos y apoyos. 
9. Se adhieran y apliquen la Declaración de Escuelas Seguras, y garanticen que todos los y las estudiantes, así como docentes, educadores y educadoras pueden aprender y enseñar en condiciones seguras.
10. Impulsen una educación transformadora, garantizando que la educación promueve la paz y la cohesión social, e incorporen enfoques de apoyo psicosocial y aprendizaje social y emocional en las respuestas educativas.

Consulte aquí la versión ampliada de este documento, donde se incluye una serie de recomendaciones más específicas para cada punto.

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^[1] Red Interinstitucional de Educación en Emergencias (INEE). (2020). 20 Años de la INEE: Los Logros y Desafíos de la Educación bajo Situaciones de Emergencias. Nueva York, NY. https://inee.org/resources/20-years-of-inee

^[2] Red Interinstitucional de Educación en Emergencias (INEE). (2020). 20 Años de la INEE: Los Logros y Desafíos de la Educación bajo Situaciones de Emergencias. Nueva York, NY. https://inee.org/resources/20-years-of-ine